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Como consumidor de medios de comunicación, uno podría tener la impresión de que, en el vertiginoso mundo actual, todo gira en torno a los medios digitales y las redes sociales y que la radiodifusión está perdiendo importancia… pero la realidad no podría ser más diferente:
Un reciente artículo publicado por la ONU subraya el papel en constante evolución de la televisión como una de las fuentes de información más relevantes dentro del panorama mediático. Aunque la TV es generalmente un medio de entretenimiento, también sirve a un propósito más amplio al abordar problemas globales, fomentar la empatía y la comprensión entre los espectadores. La televisión tiene el poder de moldear la opinión pública e influir en las decisiones a varios niveles.
En la actualidad, hay más de 5.500 millones de telespectadores en todo el mundo, con una previsión de aumento a 5.700 millones en 2028 (Statista, 2024). No es de extrañar, por tanto, que este medio sea el portavoz preferido de tantas empresas, políticos y otros actores con relevancia pública, lo que se traduce en una ingente cantidad de información que se difunde a diario.
La importancia duradera de la TV se debe a su capacidad única de llegar a públicos amplios y diversos, más allá de las fronteras geográficas, culturales y socioeconómicas. A diferencia de otros tipos de medios de comunicación, la TV ofrece una experiencia compartida que permite a personas de distintos ámbitos participar simultáneamente en el mismo contenido. Esta experiencia de visionado comunitario fomenta un sentimiento de unidad y entendimiento colectivo, lo que convierte a la televisión en una poderosa herramienta de cohesión social e intercambio cultural.
Además, la TV sigue siendo una plataforma crucial para difundir información vital y concienciar sobre problemas mundiales acuciantes. Desde los informativos que cubren grandes acontecimientos hasta los documentales que arrojan luz sobre las injusticias sociales, la televisión sirve de catalizador para el discurso público y el compromiso cívico. Al llevar temas importantes al primer plano de la conciencia pública, la TV tiene el potencial de movilizar a los espectadores e impulsar un cambio positivo en la sociedad.
Además, la evolución de la tecnología ha transformado la experiencia televisiva ofreciendo a los espectadores más opciones y flexibilidad a la hora de consumir contenidos. Con el auge de los servicios de streaming y la programación a la carta, el público puede acceder a una amplia gama de programas de televisión, películas y documentales en cualquier momento y lugar. Este desplazamiento hacia las plataformas digitales no sólo ha ampliado el alcance de la TV, sino que también ha diversificado su oferta de contenidos, atendiendo a una amplia gama de intereses y preferencias.
Ahora, para filtrar los contenidos individualmente relevantes dentro de esta aparentemente inmanejable montaña de contenidos se necesitan soluciones inteligentes como Dart de eMedia Monitor: siga y analice más de 840 canales de TV de todo el mundo, de forma totalmente automática, las 24 horas del día y reciba notificaciones en tiempo real tan pronto como se descubran contenidos relevantes para usted.
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